La Renga - Estadio Unico - 23/24 Junio


Llegada. Caminata desde la 16. Previo Choripan delante de una improvisada fogata para pasar un poco el frío que se siente aún mas al lado del bosque de La Plata. De un lado, gente gritando, contenta y feliz. Del otro, vendedores tratando de localizar alguna posible victima de la venta de remeras.
Recital extraño, luego de casi 4 años de no verlos tocar en vivo, en un recital casí sin publicidad, y de golpe verlos en ese escenário giratório. La noche se impacienta y la gente sigue cantando desaforada como si fuera el primer recital de la banda. Se apagan las luces y el humo se camufla con la niebla del bosque; paisaje ideal para gritar hasta quedarse sin voz. Baja el puente, y Chizzo, Tete y Tanque que se posicionan en el santuario para dar inicio a la ocasión.
Primeros rasgeos de la Les Paul para comunicarle a la gente, que de fondo ya empieza a sentir "Almohada de Piedra" y todos sentimos que estamos en el cielo.
Dos horas de puro sentimiento, calor, sentimiento de completitud y felicidad. Canciones nuevas, canciones viejas, canciones queridas, canciones odiadas, pero para todos los gustos.
Dividido en tres partes, ambos conciertos, con una parte de temas "lentos" en donde se apreció El Cielo del Desengaño (Domingo) y La Balada del Diablo y la Muerte (Sabado).
Diferencias pequeñas pero importantes entre ambos recitales que hiceron que uno no vaya dos veces a ver lo mismo; El sabado escuchamos un eterno delay en El Rito de los Corazones Sangrando y el domingo vibramos con Veneno y El Juicio del Ganzo.
Pero sin lugar a dudas, habrá 6/7 minutos de cada día que me servirán para vivir todo el Mes: Un verdadero popurri de canciones que hacen que uno no pueda dejar de saltar y de cantar, hasta sentir que el aire directamente desapareció del planeta Tierra. Luego de la finalización del "Momento Light" de la noche y, con un merecido descanso de por medio, un grito agónico que decía "Caminito al costado del mundo/por ahí he de andar" empezó ese momento desaforado de verdad. En el momento menos pensado, y ante la sorpresa de todos (Al menos el primero de los dos días) escuchamos el hermoso Blues de Bolívia; y cuanto todos estabamos delirando, nos dimos cuenta de que estabamos por empezar a cantar Buseca y Vino Tinto y para cantar con el último de los suspiros, el estadio entero se desató con Luciendo Mi Saquito Blusero, muchos estaban tan contentos que no se dieron cuenta que en el momento menos pensado, ibamos a querer saltar hasta el cielo con Negra es Mi Alma, Negro mi Corazón para terminar con el YA clásico "OH OH OOOOOHH!" de Panic Show.
Artista Invitado de Santuca (La rompió!) ayudando en los acordes para recordar al Rey, Pappo.
Recital extraño por momentos pero no por eso menos placentero para los mismos de siempre; extraño por todo el clima que se da en los recitales desde el 2004. Hay que reconocer que le falta cierto... color a esas fiestas, cierta química que ya no hay y no se porqué. ¿Será que me estoy poniendo viejo?
Fue raro, del mismo modo, ver a Chizzo con una Guitarra acústica para interpretar Llenado de Llorar y más aún ver cantando a Manu en Entre La Niebla, no porque no me haya gustado la canción, aunque esperaba mucho mas de él en vivo, más poder, bronca, por decirlo de alguna manera.

Y no hay ni habrá ningún recital igual que El Final es en Donde Parti y Hablando De La Libertad con bengalas de colores; benditos seamos todos aquellos que alguna vez pudimos disfrutar de semejante avalancha de emociones...

1 comentarios:

Anónimo dijo...

excelente la nota, bien completita sobre lo que paso ese finde. Lastima que no pude ir. Sabes que le falta no?? Y no es que te estes poniendo viejo.